PIÑA

La Piña es una fruta tropical originaria de Brasil. Allí la encontraron los españoles durante la conquista de América. Los indígenas la llamaban Ananas, que significa “fruta excelente”. Todos los países la llaman así excepto en España.



La piña es una fruta de la familia de las Bromeliáceas, son plantas herbáceas, que necesitan de un clima tropical para crecer en su estado óptimo y además debe madurar en el árbol, sino está ácida y no madura fuera.

Los principales países productores de piñas son: China EEUU, Brasil, Filipinas, Costa Rica, Tailandia, México.



Características generales del cultivo de la piña.
La piña tiene una amplia adaptación en las regiones tropicales y se cultiva en diversos países, aunque en algunos de ellos la cultivada y la producción son insignificantes, a pesar de su condición tropical. En contraparte, la gran producción de esta fruta se ha concentrado en unos cuantos países (Sánchez y Caraveo, 1996). Los indicadores de producción de piña por países se pueden obtener en el sitio web de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la alimentación (FAO. FAOSTAT Database - http://apps.fao.org).
La piña (Ananás comosus L. Merrill) es una planta herbácea, perenne. Pertenece a la familia de las Bromeliáceas, subclase de las monocotiledóneas. Se cultiva en las regiones tropicales y subtropicales, desde el nivel del mar hasta los 800 m de altitud. Necesita precipitación de 1000 a 1500 mm anuales, temperatura promedio de 26 oC, humedad relativa del 70 %, y un fotoperíodo promedio mínimo de 5 horas/día, o sea, 1825 horas/año.
Se distingue de los otros miembros de la familia por el hecho de que el fruto es una inflorescencia (un sincarpo), compuesto por la coalescencia de los frutos individuales, de las brácteas subyacentes y del eje de la inflorescencia, mientras que en los otros géneros los frutos individuales quedan libres.
En la planta se distinguen el tallo o eje de la planta, comúnmente conocido como cepa; las hojas, dispuestas en el tallo en forma de roseta; las raíces, las más de las veces adventicias y superficiales; el tallo o fructífero (pedúnculo), que sostiene al fruto compuesto de un sincarpo, y los rebrotes, que pertenecen a diferentes tipos según su de inserción en la planta.